Mujeres en círculo

Mujeres en círculo

foto face mujeres en circulo

En tiempos que corren, donde la cultura patriarcal prima sobre lo ancestral, las mujeres cada vez pierden mayor contacto con su ser interior y con el encuentro entre sus pares. Los Círculos de Mujeres forman parte de la vida sexual de la mujer y existieron en todos los tiempos. La oxitocina, la hormona del placer, el amor y el cuidado, fluye en los cuerpos femeninos en el orgasmo, en el parto, en la lactancia y cuando la mujeres se encuentran compartiendo espacio y tiempo entre mujeres.

Por: Silvana Barlocci – Mayra Muñoz

Los Círculos de Mujeres han sido una herramienta vincular ancestral entre mujeres de todas las edades, donde circulaba sabiduría, amor y cuidado, logrando un espacio de respeto y de paz.

Hace 5000 años en las civilizaciones pre-patriarcales, ésta era la práctica diaria y así se hacía tribu. En los círculos se está en cuerpo, alma y espíritu. Se está aquí y ahora ya que el tiempo se detiene durante el encuentro.

En los círculos se cocinaba, se cantaba, se bailaba y a través de la potencia de muchas mujeres juntas, se facilitaba el encuentro con nuestra naturaleza salvaje, con nuestro ser esencial, nuestra integridad. La energía femenina fluye y ése es uno de sus cometidos: el despliegue de la naturaleza cíclica del ser mujer, su sexualidad, su empoderamiento como ser nutricio, creativo y dador de vida.

women-talking_04_fmtLa civilización patriarcal es el sistema que impera en toda la civilización desde hace 5000 años, atraviesa casi todo lo que conocemos y se refleja en la violencia, fruto de sus principios base que son la dominación y sometimiento de los más fuertes sobre los más débiles con el fin de acumular bienes y territorio. Nos referimos a violencia como imposibilitar el deseo del otro o considerarlo menos y entendemos la violencia en sus múltiples facetas, tanto visibles y ruidosas hasta las invisibles y pasivas. Una de las grandes consecuencias ha sido el sometimiento y dominación de la mujer, reprimiendo su sexualidad y delegándola únicamente al encuentro con el varón. A causa de esto las mujeres dejaron de conocer sus propios orgasmos, la energía de sus 4 ciclos menstruales, han tenido partos y menstruaciones dolorosas, lactancias cortas o fracasadas y envidia y competencia entre nosotras mismas.

La represión sexual ha hecho que nuestro útero se volviera rígido y por eso sentimos dolor al parir y al menstruar. Los Círculos de Mujeres forman parte de la vida sexual de la mujer. La oxitocina, la hormona del placer, el amor y el cuidado, fluye en los cuerpos femeninos en el orgasmo, en el parto, en la lactancia y cuando la mujeres se encuentran compartiendo espacio y tiempo entre mujeres. La vida sexual de la mujer es vastosísima y no se reduce al encuentro genital con un hombre. Que esto sea así, limita tanto a unos, como a otros.

Los Círculos de Mujeres, incluyen al hombre aunque no participe directamente de uno, ya que al colaborar con encontrar nuestro lugar en el mundo, la humanidad toda se beneficia.

En los Círculos de Mujeres se propone reconciliarnos con nuestra esencia, reconectar con nuestro útero, nuestros ciclos y sanar las heridas que estamos heredando por línea femenina a través de nuestro linaje materno.

El Círculo nos cobija al igual que un útero, para abrir el corazón, sacar nuestra luz y sombra sin miedo y renacer si es necesario. Se teje una red de confianza y un pacto de confidencialidad.

En cada Círculo se enraíza nuestro vínculo directo con la Madre Tierra y todos sus misterios.

Actualmente, los Círculos de Mujeres se siguen formando, porque nuestra naturaleza nos lleva a ese encuentro.

Suele ser difícil captar la necesidad que tenemos unas de otras, porque estamos inmersas en un sistema en el cual todo lo femenino se desprestigia, se banaliza, se cosifica y busca su extinción. Pero el deseo de unión es más fuerte de lo que creemos, el don de la empatía es más poderoso de lo que creemos, y las mujeres nos seguimos buscando, para hablar, para llorar, para crear. Nos necesitamos para reactivar nuestro Ser Mujer, un don del cual es imposible despojarnos, que habita en nosotras y que al reunirnos comprendemos de qué se trata.

Las mujeres tenemos mucho saber en los huesos, mucho para dar y mucho para recibir, sólo hay que crear el espacio para que la magia aparezca.

Círculo de Mujeres Aguará

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *